Una mirada al tiempo

Panteón de Roma. Grabado de G.B. Piranesi.(1720-1778)

La arquitectura refleja en sus paredes el paso del tiempo, pero puede hacerlo ocultándolo (reparación y conservación) o dignificándose por ello.

En la imagen vemos la visión romántica que Piranesi tenía del Panteón. Acentuando el aspecto de ruina ponía en valor la antigüedad del edificio, su vuelta a la naturaleza.

Este valor confronta que Piranesi otorga al Panteón confronta con el de contemporaneidad. Estos valores y otros fueron descritos por A. Riegl:

Valores de antigüedad: valor histórico, valor monumental

Valores de contemporaneidad: valor instrumental, valor estético, valor estético relativo, valor de novedad

• Valor de antigüedad. El valor de la antigüedad de un monumento se descubre a primera vista por su apariencia no moderna, y se pone de relieve de un modo mucho más patente ante efectos como el deterioro de la superficie, así como por el desgaste de bordes y esquinas, etc., que ponen de manifiesto la labor de las leyes de la naturaleza.
• Valor histórico. El valor histórico de un monumento reside en que representa una etapa determinada, y será tanto mayor cuanto menor sea la alteración sufrida en su estado cerrado originario. 
• Valor monumental (valor rememorativo intencionado). Se da en las construcciones que fueron levantadas con la intención de rememorar algo, de permanecer en la conciencia de generaciones posteriores. Es el monumento propiamente dicho, y se debe conservar siempre en el presente de las generaciones futuras. Se acerca a los valores de contemporaneidad. Se borra de ellos cualquier vestigio del paso del tiempo. 
• Valor de contemporaneidad. Responde a un predominio del cambio, frente a la permanencia de los valores de antigüedad. 
• Valor instrumental. Valora el uso como algo fundamental, es lo que siempre debe haber en una obra, pero no debe sacrificar los valores rememorativos.

Mediateca. Sendai, arq. Toyo Ito. Valor instrumental.

• Valor estético. Satisface a la sociedad actual y se opone a los valores rememorativos, porque lo que nos gusta a nosotros no es lo que gustaba en la época de creación de la obra. 
• Valor estético relativo. Se produce cuando entra en resonancia una estética pasada con la época actual, restaurándose los valores estéticos en el presente. 
• Valor de novedad. Se valora la obra simplemente porque es nueva y no recuerda a nada anterior.

Museo Guggenheim. Bilbao, F. Gehry. Valor de novedad.

Hay que intentar poner en resonancia ambas sensibilidades. La arquitectura histórica se puede convertir en proyecto de futuro, introduciendo la memoria histórica en la concepción de nuevos proyectos. Ésta es la manera en la que trabajan los arquitectos, ya que es prácticamente imposible crear de la nada, siempre contamos con referencias históricas.